lunes, 20 de junio de 2011

"Cura tus represiones"

Pretendí rimar versos con rosas
pero sólo afloran espinas
eso sí, no me duelen
están hechas de tinta.

Pretendí rimar versos con amor,
pero no me sale,
prefiero la palabra pasión.

Pretendí rimar versos con marido,
demasiado sencillo,
me gusta más
amante y amigo.

Pretendí rimar versos con velada,
nunca he sabido,
me gusta despertarme
sin haber dormido.

Nunca he pretendido rimar
versos con familia,
pues no se puede estar en el plato y en la tajá
y como sé perfectamente hacia donde caminar,
voy buscando otras rimas que me diviertan más;
uno y uno no son tres sino dos,
porque quiero y lo decido yo.

¿Rimar con cuentos de hadas?
Por favor, a estas alturas
ni la nieve es blanca
ni la carroza, una calabaza.

Aquí no hay rimas que sugieran ¡cuán preciosa y maravillosa es la vida!
Sí las hay que vociferan realidad
esa de la que en voz baja hablan los demás,

¡Silencio, eso no se debe contar!
¿de qué hablar si no es de un instante?
¿de minutos vacíos en medio de ná?
yo rememoro momentos
cargados de intensidad,
que pasar por pasar,
es tiempo perdido,
es algo que ni es, ni fue, ni será.

Al que quiera escuchar milongas,
o que le doren la píldora,
que se ponga a otra cosa,
que para escribir y hablar a medias,
ahí están los mass media.
P. Castañeda, J.M. Delfín.


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